La mujer FADP es creativa, se ama, se respeta y es segura de si misma porque cada una de nosotras es capaz de transformar ideas, desafiar límites y crear algo único, no solo con sus manos, sino con su corazón y su mente. A lo largo de su camino, nuestras mujeres no solo aprenden a diseñar, sino a ser auténticas, a tener confianza en sí mismas y a defender sus ideas con valentía.



